Oriol -140515-
-LA ANATOMÍA ESPIRITUAL Y SU IDENTIDAD-
Existen
preguntas aun, que a mi forma de ver la realidad en la que estoy envuelto,
reflejan atributos energéticos, que si pueden ser integrados, responderán a
respuestas que esperamos de mucho tiempo atrás, y que están justo en frente, de
nosotros. En muchas de mis “visiones”, estas me presentan con claridad las
posibilidades, y es a través de mi representación dentro de los escritos,
“dentro de la anatomía espiritual y su identidad” que intento reflejar de una
forma practica, lo que puedo llegar a ver en estas. Todos y cada uno, tenemos
una forma de ver personal, sea a través de imágenes, sentimientos o tal vez
percepciones, posibilidades o potenciales los cuales, se pueden compartir con
nuestro alrededor, una vez sentemos de veras las bases, para que estos sean
llevados a cabo, con firmeza y compromiso. Siento y me encanta, compartir toda
esta información con vosotros, ya que es una forma de ayudar a despertar, que
se refleja dando posibilidades que pueden actuar, a través vuestro de una forma
similar a como lo han hecho conmigo. En primer lugar, hemos de creer en lo que
percibimos cuando esta percepción, representara una parte de la anatomía, de lo
que nosotros somos, en esta red telúrica inferior. A partir de ahí, vamos a ir
construyendo una realidad más personal, y desarrollando estas “visiones o
percepciones”, para adquirir firmeza a través de estas. Una vez esta firmeza se
represente, con total claridad seremos capaces de emitir, todo ese conjunto de
energías que forman parte de cada uno de nosotros, para poder ayudar a nuestro
alrededor, una vez en primera instancia nos podamos, haber ayudado a nosotros
mismos. Este camino, no es sencillo pero tampoco intransitable. Tan solo es
cuestión, de agarrarnos a lo que realmente somos y expandir en su totalidad,
esas energías que nos representan, con la intención de formar parte de una
célula planetaria, emitiendo sus energías en una actitud, basada en una
densidad superior.
Aquí tenéis
una serie de percepciones, que os entrego para que evaluéis, a través de
vuestros propios conocimientos. Reflejan un poco de mi experiencia personal,
aun así pueden ser extendidos de tal forma, que nos ayuden a adjuntar unos
archivos más personales, con los cuales ampliar la información que estoy
compartiendo. Haceros cada uno de estas preguntas a título personal: ¿Hemos
sido capaces por un momento, de evaluar el tiempo que nos rodea?, ¿Y de qué
forma se representa en nuestras mentes, esta construcción dentro de una
presencia lineal?, toda manifestación adquiere una transformación, a través de
la cual pueden ser reconocidos, diversos estados o estadios, en los que adquirir
información personal para ampliar, una percepción más elevada de las cosas. De
esta forma, sabemos que el tiempo que transcurre dentro de nuestras vidas, se
encarga de seguir, restableciendo las líneas que representan todas y cada una,
de nuestras posibilidades las cuales se acomodan, unas tras otras como
experiencias-posibilidades, mientras están directamente sumergidas, dentro de
nuestra anatomía espiritual, a través de nuestra percepción real, al
seguir restableciendo una precisión de
inseguridad, (debido a nuestro propio estado de ascensión, en el cual
profundizamos en el entender, las muchas posibilidades que acontecen, en
nuestra propia visión de la realidad). De esta forma, tan solo nos aleja más,
cuando no tomamos consciencia de ello, de llegar a ver con claridad, la
dirección a seguir, mientras esta se representa desde una fuente sin fin de
posibilidades, a través de las cuales, restablecer la constante de un principio
basado, en la consecuencia de nuestras propias acciones.
Mientras
centramos nuestras experiencias, en un bucle de identidad basado en nuestra
percepción humana, nos alejamos de establecer contacto, con esa parte más
divina, que forma conjunción con nuestras mentes, y que espera a ser
reconocida, para volver a ser representada, dentro de nuestro proceso de
ascensión, como seres humanos. Una vez reconocemos el tiempo, (no el tiempo,
basado en una experiencia de presencia lineal), sino en una manifestación
dirigida, por la extensión de todo lo que somos, podemos impregnarnos de la longitud
total de onda, desde la cual integramos los grados y niveles, de nuestra
autonomía espiritual. Esta establece los parámetros necesarios, a través de los
cuales toda representación, impregna nuestras vidas en una fusión experimental,
en la cual a medida que avanzamos, en nuestros propios destinos auto impuestos,
las constantes de un tiempo de prosperidad, se realzan como prioridades a
alcanzar con firmeza. Dando lugar a intentar reconocer, las posibilidades que
nos muestra nuestra experiencia lineal de tiempo, las siguientes ramificaciones
de una propuesta de tiempo, se realzan como estandartes, que iluminan nuestras
psiques en todas, y cada una de sus representaciones. El fuego del espíritu,
emerge de una propuesta de tiempo sumida en la eternidad de la cual formamos
parte. Es a través de esta, que los anales de nuestra identidad espiritual, se
mantienen unificados en una verdadera dirección, la cual implanta toda representación,
por encima de la propuesta de tiempo.
Oriol,
gracias así sea.
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