Oriol
-051115-
-EL TIEMPO EN UNA VERSIÓN, MÁS DESARROLLADA-
Oriol
Escritor y Terapeuta.
Dentro
de los aspectos del tiempo, nos vemos inmersos en una constante de
posibilidades, que se reflejan a través nuestro, dentro del ciclo de desarrollo
en el cual desarrollamos los arquetipos, a través de los cuales, todos y cada uno
podemos contemplar, nuestras propias experiencias en la transición, del tiempo
y sus constantes en nuestras mentes. Para una mente desarrollada, su versión de
tiempo trasciende la limitada representación, del transcurso donde se encuentra
una mente lineal, la cual se ve a sí misma tan solo rodando, en una experiencia
cíclica de posibilidades, que delimita todas sus constantes experiencias. Esta
se ve a sí misma, actuando desde una óptica de tiempo basada en la linealidad,
de esta forma contempla como en la sucesión de su vida, todos los aspectos se
reflejan uno tras otro, y sin posibilidad de trascender esa versión, hasta una
toma más real de consciencia de sí mismo, y sus posibilidades. Dentro de esta percepción,
se establecen en su propia representación en su frecuencia lineal,
posibilidades para trascender esa limitación, en comportamientos que le dan
fuerza a su versión inferior, los cuales actúan hacia el exterior reflejando
sus propios egos. Estos fortalecen esos aspectos como el control, la manipulación
y la vanidad en sus acciones. De esta forma, contemplamos como su grado
evolutivo se refleja en esa textura de tiempo limitado, la cual tan solo
acontece de forma limitada en la expresión, de su propia mente lineal. Dentro
de una versión más desarrollada, la experiencia del tiempo no se refleja de
forma limitada, más bien se expresa de forma unificada en todo, lo que rodea
nuestras existencias. Ya no existe la limitación de tiempo, por el contrario se
refleja a sí misma la transición de todas las experiencias, a través de un
flujo constante de energías, que nos arropan en todos los actos que llevamos a
cabo. No es necesaria la manipulación, ni la vanidad ya que el mismo Dios, nos
entrega todo lo que es necesario para atravesar, esos eslabones de nuestro
crecimiento, sin actuar desde una versión inferior, de nuestros propios egos.
Esta transición
de un nivel a otro, trae consigo diversas estructuras que se tienen que
consolidad, las cuales forman parte del desarrollo personal de cada uno, en la
tendencia de reconocernos, en su total manifestación de la no-identidad al
trascender la identidad humana. Una vez integramos esto, establecemos los
enlaces a través de los cuales, comprendemos como todo lo que nos rodea, se ve
inmerso a sí mismo, como posibilidades de desarrollo, y a medida que nos
adentramos en reconocerlas, experimentamos una fuerte conexión, de la cual
extraemos todo ese flujo, dentro de los eslabones, que presentan dicho
crecimiento. Estemos en el nivel o grado, que nos represente nuestra evolución
sigue hacia delante. Esto nos hace tomar consciencia, de que en la versión de
nuestro ego inferior, viviremos sometidos a procesos de transformación, donde
la densidad de nuestras experiencias, nos impedirá desarrollar lo que somos con
más facilidad. Entre estos aspectos, todo transcurre de una forma más lenta y
los aspectos que favorecen nuestras vidas, se ven muy lejos hasta que no
adoptamos una versión del tiempo más desarrollada, para actualizar nuestras
experiencias y todo lo que las rodea. A medida que nos adentramos, en
comprender nuestras propias posibilidades, estas actúan (siempre en el nivel de
desarrollo que nos represente) ampliando el campo de percepción de nuestras
existencias, en su total manifestación. Como he citado en anteriores artículos,
nunca dejamos de evolucionar aunque si podemos presenciar, que dependiendo de
la densidad de nuestras existencias, estas pueden crear que nos veamos a sí
mismos, atravesando un estado de “pause personal”, cuando todo lo que nos
rodea, sigue su propio curso personal. Mientras nos veamos a sí mismos,
influenciados por las energías del exterior, estas tan solo se nutrirán de nosotros
a la vez, que nos impedirán seguir avanzando, en la dirección adecuada
la cual fluye, de nuestro interior desde nuestra experiencia personal, de
reconocimiento con el todo. Estas actúan directamente bajo muchos arquetipos,
ya diseñados por nuestras mentes, los cuales reflejan los diversos niveles, que
operan desde nuestra integridad como personalidades, al desarrollo de la consciencia
como humanos.
Oriol,
gracias por su lectura y difusión.
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